FUENTE DE LOS SEIS CAÑOS

Donde se ubica esta fuente natural se pueden ver además otras dos instalaciones públicas que perdieron su relevancia con la llegada del agua corriente a las casas: el abrevadero y los lavaderos.

Esta fuente aún abastece al municipio. Del sobrante se nutren los caños, el antiguo abrevadero de ganado, los lavaderos y el reguero.  

Los lavaderos están formados por dos pilas, la de entrada de agua limpia, o de aclarado y la de salida o de lavado.

Siguiendo el curso del agua, se pasa por un antiguo molino harinero y se llega a los lavaderos viejos, a la salida del pueblo, utilizados antaño para el lavado del cáñamo cultivado en los huertos cercanos. Con esta fibra, tras un laborioso proceso de transformación que incluía además del lavado, el machacado, el espadado, el hilado y el tejido, se hacían costales, alforjas, sogas, poyales, sábanas y hasta camisas.

MONTE. LA SERREZUELA DE PRADALES

En el extremo más oriental de la Comunidad de Villa y Tierra de Fuentidueña, en el término de Torreadrada, tenemos la imponente Serrezuela de Pradales.

Esta serrezuela está formada por una tupida vegetación arbustiva de roble rebollo con rodales de brezo, jara, tomillo, lavanda; por pinares de pino laricio y pino silvestre; por densos encinares que se mezclan con quejigos, etc.

Las distintas formaciones vegetales y su continuidad, hacen posible la formación de un ecosistema de bosque de media montaña.

Todo el conjunto de la Serrezuela rompe la monotonía de las llanuras y confiere al entorno un paisaje natural de especial interés. Por ello, este enclave fue propuesto como Lugar de Interés Comunitario (LIC) en el año 2004, por su representatividad y singularidad sobre las llanuras de campiña. Además, por su trascendencia, es necesario destacar la presencia de lobos (especies de interés para su conservación).