Te invitamos a que disfrutes del maravilloso paisaje que ofrecen las pequeñas hoces del Duratón hasta su llegada a Fuentidueña: vistas espectaculares de los cortados que el río ha ido trazando a su paso, que se conjugan a la perfección con ruinas de ermitas, castillos y villas medievales que nos remontan a épocas pasadas. ¿Te atreves?
La ruta discurre entre los municipios de San Miguel de Bernuy y Fuentidueña y se puede iniciar indistintamente en cualquiera de los dos pueblos.
Para conocer este bello paraje saldremos de San Miguel de Bernuy. La ruta se inicia en el puente de piedra que cruza el río Duratón.
En un camino ascendente por senderos llegamos hasta las ruinas de la ermita conocida como las ermitonas. Seguimos nuestro camino y vemos en lo alto de la otra margen otras dos ermitas, los sanpedros y los sanmartines.
Caminamos por el páramo, con los altos cortados a nuestros pies y viendo la sinuosidad del río, hasta que divisamos un espacio realmente bello. El agua pasa de ir entre las rocosas paredes del cañon a discurrir tranquilo en un espacio mucho más abierto, es la zona de la Serranilla. En todo nuestro camino nos irá acompañando el buitre leonado, que nos mira desde lo alto haciendo un vuelo magestuoso.
Descendemos hasta las proximidades del río y paramos a descansar en esta zona, donde nos podremos dar un baño o incluso montar en piragua.
Siguiendo nuestro camino tomamos ahora un camino rural, que nos llevará entre viñedos y campos de almendros hasta la villa de Fuentidueña. Aquí, en el puente de piedra que cruza el río finaliza nuestra ruta. ¿Regresamos andando hasta San Miguel de Bernuy?
Especies de flora y fauna que podemos ver en nuestro camino:
FLORA
Por la paramera: Artemisia campestris y tomillos que dan cuenta del carácter degradado y empobrecido del terreno. En los cortados la planta más abundante son los zapatitos de la virgen.
Cerca del río, donde las paredes han permitido el desarrollo de vegetación hay fresnos, sauces, espadañas, juncos… A partir de la Serranilla las ladera son más suaves y en ellas se han instalado bosquetes de quejigos y encinas con su sotobosque correspondiente de tomillos, jaras, lavanda, cantueso…
FAUNA
La fauna más fácil de ver son los buitres, los alimoches, la chova piquiroja y la grajilla, que anidan en los altos cortados formados por el río.
En la paramera, si caminamos en silencio podremos ver algún conejo, liebre, zorro… entre las aves las más abundantes están la perdiz roja y la cogujada común.
Cerca del río, si andamos con cuidado podemos ver alguna nutria, visón americano, garza real o ánade. Además de barbos, truchas, carpas y cangrejos de río. |